Saraguro es un Cantón al sur del Ecuador en la provincia de Loja, en este lugar habita una cultura milenaria con especiales costumbres, donde el sol que marca el tiempo por instantes parece detenerse entre los sembríos del maíz que son su característica principal.
En este lugar, las formas de relacionarse se entrecruzan entre el pasado y el presente: dentro de las comunidades una bocina informa de asambleas, de perdidas, hallazgos, mingas y raymis; las relaciones de comunicación son mucho más cercanas y directas, la velocidad con la que circula la información supera a las redes virtuales; nada es tan efectivo como un trayecto en camioneta de la comunidad al centro de la ciudad. A la gente le gusta contar, hablar y bromear.
En contraste a esto, los medios de comunicación tradicionales, en especial la radio, que es el principal medio de comunicación en Saraguro carecen de una parte importante: la comunidad participando como actora. A pesar que ninguno de los medios que existen en Saraguro pertenece a grandes empresarios su propuesta no está cercana a la comunidad.
La comunidad tiene mucho que decir, por lo que una radio comunitaria se convirtió en una necesidad. Así nace una experiencia que haría brillar los ojos y el espíritu antisistema de algún loco o loca idealista. Una comunidad se atrevió a tomarse el aire, a levantar la voz y con cables reciclados producto de radios viejas y micrófonos donados lograron hacer sonar una radio de onda corta en la Comunidad de Gera.
Gera es una comuna de Saraguro conocida por ser productora de la bebida tradicional de Saraguro: el guajango. En 2009 esta comunidad comenzó su travesía radial de la mano de un grupo de jóvenes liderado por Claudio Sigcho, quienes se apropiaron de una frecuencia que sonaba dentro de la comunidad. A pesar de que la radio funcionó muy poco tiempo, la simple experiencias de apropiación legítima y constitucional de la frecuencia se convirtió en un mito en la comunidad. Las personas contaban de una radio que se escuchaba en todo lado, de una radio a la que iban todos a hablar.
Uno de sus protagonistas Samuel Puglla lo cuenta: “La comunidad tenía la predisposición de defender la radio, no dejar que se lleven los equipos que tanto esfuerzo nos costaron”.
Para Julio Lima, líder de la comunidad y actual vicepresidente de la Coordinadora de Organizaciones del Pueblo Kichwa de Saraguro, la radio en esa época fortaleció la participación de la comunidad y con alegría recuerda una anécdota que dio cuenta de la apropiación de la comunidad de su radio. Un día un grupo de bandidos estaba robando en la comunidad, alguien avisó a la radio, quien a su vez en ese mismo instante informó a la comunidad. Así cuenta Julio: “en pocos minutos todos estábamos fuera de las casas, reunidos en la casa comunal, organizándonos para capturar a los ladrones, si usábamos la bocina los ladrones hubieran huido, pero la radio nos sirvió mucho en ese momento”
Después de un tiempo la radio dejó de sonar, pero la comunidad guardó en su memoria a su medio comunitario. En abril del 2016 la organización Corpukis, como parte del proceso de Comunicación Comunitaria que lleva adelante con la CONAIE y El Churo, obtuvieron toda la información del Concurso de Frecuencia. Es así que en mayo, realizaron un Asamblea General con mas de 100 representantes de las familias donde decidieron participar en el Concurso Nacional de Frecuencias de Radio y Televisión.
EL 30 de junio de 2016, Pedro Lima, presidente de la Comuna Gera, junto a una delegación del Pueblo Kichwa de Saraguro acudieron a la sede de ARCOTEL en Cuenca. Los tres proyectos construidos colectivamente proponen a Kipa Radio como un medio incluyente que fomente la participación de la comunidad.
Con una propuesta fresca, articuladora, enfocada en la educación y la promoción de la identidad del pueblo Kichwa Saraguro, además con un enfoque de género y respeto a las diversidades, este nuevo medio comunitario espera ser un eje articulador de las diferentes organizaciones y propuestas sociales.
En junio del 2017 Kipa Radio recibió la resolución definitiva como ganadora del concurso, recibiendo la concesión por 15 años de la frecuencia 91,3 FM.
Aunque aún no están al aire, en la comunidad de Saraguro ya suenan las “kipas” que convocan a la minga para la instalación de la radio. Legalmente tienen un año para implementar la radio y realizar la primera emisión, para lo cual necesitan el apoyo sobre todo económico más allá de las fronteras propias de su territorio.